Glosario
Términos complejos explicados de forma Simple, a lo Lowi.
En el panorama digital actual, la elección de la infraestructura de alojamiento (hosting) desempeña un papel clave en el rendimiento, la seguridad y la escalabilidad.
Los servidores privados virtuales (VPS) son una solución de alojamiento estratégica que se sitúa entre el hosting compartido básico y los servidores dedicados de alto coste, consolidándose como una opción fundamental.
Las siglas VPS significan Virtual Private Server o servidor privado virtual: un entorno virtualizado e independiente que opera dentro de un servidor físico más grande, generalmente propiedad de proveedores de servicios cloud o hosting web.
Entonces, ¿qué es VPS? En términos informáticos, un VPS es una forma de servidor virtual en la que un hipervisor divide los recursos de hardware en servidores independientes y privados.
Si todavía te preguntas qué es un servidor virtual, imagina un ordenador muy potente dividido en varios ordenadores más pequeños e independientes. Cada “miniordenador” tiene su propio sistema operativo y puede ejecutar programas distintos, como si fueran equipos diferentes.
Cada VPS tiene su propio OS y una porción dedicada de CPU, memoria y almacenamiento.
Para entender qué es un servidor VPS y cómo funciona, hay que aclarar que actúa como una máquina virtual que contiene todo lo necesario para ejecutar un sitio web o una aplicación.
Un VPS utiliza software de virtualización (hipervisor) para dividir un servidor físico en entornos virtuales independientes.
Desde el punto de vista del usuario, un VPS se comporta como un servidor dedicado, aunque comparta el hardware con otros. Tienes acceso de administrador y puedes instalar el software que quieras.
Ahora que sabemos qué es un VPS, veamos para qué sirve. Es ideal cuando necesitas más control o recursos que un hosting compartido, sin llegar al coste de un servidor dedicado. Los usos más comunes son:
Gracias a su rendimiento, un VPS permite jugar online sin interrupciones. Y si quieres mejorar tu conexión, échale un ojo a nuestras ofertas de fibra y móvil. ¿Prefieres juegos sin conexión? Descúbrelos en este artículo de juegos sin conexión.
Un VPS es una opción muy flexible y potente para quienes necesitan rendimiento, personalización y autonomía, por encima del hosting compartido.
Una vez entendido qué significa VPS, es clave conocer sus diferencias con el hosting compartido para elegir bien tu infraestructura. El VPS te ofrece recursos dedicados y mayor control, mientras que el hosting compartido es más limitado y está pensado para proyectos más pequeños.
El hosting compartido es económico y sencillo, pero ofrece un rendimiento y un control limitados. Un VPS, en cambio, te garantiza recursos dedicados y una mayor seguridad, a un coste algo superior. Aquí tienes las principales diferencias:
Hosting compartido: La CPU y la RAM se comparten entre muchos usuarios.
Hosting VPS: Cada VPS tiene asignadas CPU, RAM y almacenamiento dedicados.
Hosting compartido: Sin garantías. Todas las cuentas comparten el mismo conjunto de CPU, RAM y almacenamiento.
Hosting VPS: Asignaciones fijas. El hipervisor reparte recursos del servidor anfitrión a cada VPS.
Hosting compartido: Limitado. No puedes instalar software personalizado ni modificar configuraciones.
Hosting VPS: Acceso completo como root o administrador. Puedes configurar todo libremente.
Hosting compartido: Es la opción más económica. Adecuada para sitios pequeños.
Hosting VPS: Mayor coste que el compartido, pero mucho más económico que un servidor dedicado.
Hosting compartido: Limitada. Para crecer, necesitas cambiar de plan o migrar.
Hosting VPS: Altamente escalable. Puedes aumentar o reducir RAM, CPU y almacenamiento cuando lo necesites.
Hosting compartido: Menor aislamiento. Si otro sitio tiene problemas de seguridad, podría afectarte.
Hosting VPS: Mayor aislamiento y seguridad. Cada VPS funciona en un entorno independiente o sandbox.
Deberías plantearte utilizar un servidor privado virtual en cualquiera de los siguientes casos:
Recomendamos optar por un VPS cuando requieras más potencia, fiabilidad o control del que te ofrece el hosting compartido, pero aún no necesites un servidor dedicado completo.
Al comparar opciones de VPS, conviene tener en cuenta los siguientes factores:
Consejo: Revisa opiniones de otros usuarios y compara benchmarks. Así podrás elegir un VPS que se adapte a tus necesidades técnicas y a tu bolsillo.