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Términos complejos explicados de forma Simple, a lo Lowi.
Si alguna vez te has preguntado qué es la GPU (Unidad de Procesamiento Gráfico), estás en el lugar adecuado. La GPU, cuyas siglas vienen del término en inglés «Graphics Processing Unit», se ha convertido en uno de los componentes clave de la computación moderna.
Pero, ¿qué es una GPU en informática? Podemos decirte que es un chip especializado diseñado originalmente para acelerar el procesamiento de gráficos que ha evolucionado hasta convertirse en la columna vertebral de aplicaciones que van mucho más allá.
Así es, en la actualidad, la GPU se usa para machine learning, simulaciones científicas, criptografía y computación de alto rendimiento. Su arquitectura permite realizar miles de operaciones simultáneas, algo en lo que supera con creces a las CPU tradicionales.
Por otra parte, puede que te interese saber qué es la GPU de un ordenador. En términos prácticos, es ese componente que determina si podrás jugar a los últimos títulos en ultra calidad, editar vídeo en 4K sin tirones, o incluso entrenar modelos de inteligencia artificial desde tu propia casa.
En esencia, la GPU es el «músculo» computacional que descarga a la CPU de tareas intensivas y repetitivas, permitiendo que todo el sistema funcione de forma más eficiente.
Veamos qué es la GPU desde un punto de vista más preciso: se trata de un circuito integrado especializado en cálculos intensivos y paralelos.
Mientras que una CPU (Unidad Central de Procesamiento) funciona como un experto en tareas complejas y secuenciales, la GPU actúa como una brigada de cientos o miles de ayudantes que ejecutan la misma tarea simple a la vez.
Esta diferencia fundamental en la arquitectura es lo que hace a las GPU tan potentes para ciertos tipos de trabajo. Están diseñadas para procesar grandes volúmenes de datos aplicando las mismas operaciones matemáticas en paralelo, lo que resulta ideal para renderizar millones de píxeles, calcular física en tiempo real o entrenar redes neuronales.
Técnicamente, una GPU puede tener desde cientos hasta miles de núcleos de procesamiento trabajando al unísono, comparado con los pocos núcleos (pero muy potentes) de una CPU convencional.
Las GPU se presentan en variantes integradas (iGPU), que vienen incorporadas en el mismo chip que la CPU y comparten la memoria RAM del sistema; y discretas (dGPU), que son tarjetas de expansión independientes con su propia memoria dedicada (VRAM).
Ahora que sabes qué es la GPU, hablemos de sus funciones principales y aplicaciones. La versatilidad de estas unidades de procesamiento ha crecido exponencialmente en la última década, expandiéndose desde su propósito original hasta ámbitos que probablemente nunca imaginaron sus creadores.
Esta es la función original y más conocida de las GPU. En videojuegos, diseño CAD, edición multimedia y modelado 3D, la GPU se encarga de generar y mostrar miles de píxeles simultáneamente, aplicando texturas, efectos de iluminación y sombras de forma fluida.
Las arquitecturas modernas incorporan tecnologías avanzadas como el trazado de rayos (ray tracing) para lograr gráficos fotorrealistas, calculando cómo rebota la luz en las superficies en tiempo real.
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En entornos científicos e industriales, las GPU son fundamentales en supercomputadoras y clústeres de cómputo.
Las GPU aportan cientos o miles de núcleos de procesamiento paralelo, permitiendo resolver en horas problemas que de otro modo tardarían días o semanas. Los centros de datos modernos se construyen alrededor de clústeres de GPU precisamente por esta capacidad de aceleración.
La arquitectura de las GPU está optimizada para dividir una tarea grande en muchas subtareas más pequeñas y procesarlas simultáneamente. Esto las hace ideales para cualquier aplicación que pueda paralelizarse.
NVIDIA popularizó el uso general de esta capacidad con CUDA en 2007, permitiendo a los desarrolladores ejecutar todo tipo de programas de cómputo intensivo en la GPU, no solo gráficos. AMD ofrece su alternativa de código abierto ROCm para el mismo propósito.
Este es probablemente el ámbito de mayor crecimiento actual. Entrenar redes neuronales profundas implica millones de operaciones matriciales paralelas, exactamente el tipo de cálculo en el que las GPU sobresalen.
Por ello, prácticamente todas las aplicaciones modernas de IA y ML se sirven de GPU para mejorar drásticamente su velocidad y eficiencia.
Las GPU con Tensor Cores especializados (como las de NVIDIA) aceleran específicamente estas operaciones de inteligencia artificial, permitiendo entrenar y ejecutar modelos complejos de visión por computador y procesamiento de lenguaje natural.
Las GPU jugaron un papel central en la minería de criptomonedas como Bitcoin o Ethereum, gracias a su capacidad para ejecutar millones de cálculos de hash en paralelo.
Lo que hace NVIDIA en este contexto es interesante, ya que, durante los picos de demanda, la compañía comercializó unidades especializadas (serie CMP HX) e introdujo limitaciones de tasa de hash (LHR) en sus tarjetas de consumo para redirigir el inventario hacia gamers y profesionales.
Aunque el mercado ha evolucionado hacia chips ASIC más especializados y protocolos de Prueba de Consenso, las GPU siguen siendo relevantes para minería «casera» de ciertas criptomonedas.
Una búsqueda común en internet es «¿qué es CPU y GPU?», porque muchos usuarios quieren entender cómo se complementan estas dos unidades de procesamiento fundamentales.
La clave está en comprender que ninguna es superior a la otra: son complementarias y están diseñadas para propósitos diferentes.
La computación moderna opera bajo un modelo heterogéneo donde la CPU actúa como director que gestiona las tareas generales, mientras la GPU funciona como acelerador masivo para secciones específicas del código.
¿GPU es lo mismo que tarjeta gráfica? Respondamos a esa pregunta de forma sencilla: no son exactamente lo mismo, aunque en el habla cotidiana los términos se usen como sinónimos.
La GPU es el chip de procesamiento, el cerebro de silicio que realiza los cálculos. La tarjeta gráfica (o tarjeta de vídeo) es la placa de expansión completa que se inserta en la placa base de tu ordenador.
La tarjeta gráfica incluye la GPU junto con otros componentes esenciales: memoria de vídeo dedicada (VRAM), sistema de refrigeración (disipadores y ventiladores), reguladores de energía, BIOS y conectores de salida de vídeo (HDMI, DisplayPort, etc.).
En otras palabras, cuando compras una «GPU», en realidad estás adquiriendo una tarjeta gráfica completa con el chip GPU como componente central.
La GPU es solo el procesador; la tarjeta gráfica es el ecosistema completo que permite que ese procesador funcione óptimamente.
Para entender cómo funcionan estas potentes unidades, conviene conocer sus elementos internos principales:
El mercado está dominado por tres actores principales, cada uno con fortalezas en diferentes segmentos:
En cuanto a fabricantes que trabajen con la GPU de NVIDIA 9600GT, cabe mencionar que este modelo específico formaba parte de la serie GeForce 9 y fue fabricado por diversos partners de NVIDIA como ASUS, MSI, Gigabyte, EVGA y Zotac.
Este modelo representó un hito en su época al ofrecer excelente rendimiento-precio para gaming y fue una de las tarjetas más populares antes de la revolución de la computación paralela que vendría después.
Si te ha resultado útil entender qué es una GPU y cómo funciona, te invitamos a descubrir más sobre los componentes para tu PC gaming para que puedas montar o mejorar tu equipo con conocimiento de causa.