Tener un PC gamer es el sueño de muchos. Las consolas han dejado de ser la opción popular y más común para poder jugar. Aunque puede sonar complicado, con esta guía te explicamos los componentes y pasos principales para que sepas cómo montar tu pc gaming.
Componentes de un PC gaming
Para saber cómo montar un PC gaming por piezas, primero hay que conocer los elementos básicos que necesitas:
Tarjeta gráfica
Es uno de los componentes estrella a la hora de jugar a videojuegos. Te permitirá disfrutar de gráficos más o menos realistas. Cuanto más inviertas en ella, mejores resultados obtendrás en este aspecto.
Por ejemplo, si gastas entre 100 y 250 euros, seguramente tu tarjeta gráfica sea ideal para juegos de no más de 1080p de resolución. Sin embargo, si inviertes más, en el mercado puedes encontrar opciones perfectas para resoluciones de 4k.
CPU
La CPU o la Unidad Central de Procesamiento será vital para tu PC, ya que sin ella… no funcionará. Es la que interpreta las acciones del sistema operativo y en pocas palabras, será el cerebro de tu ordenador.
Para conseguir una experiencia óptima, tendrás que valorar la capacidad de tu CPU. Deberás fijarte por lo tanto en el número de núcleos y frecuencias que tiene.
Por lo general, para muchos juegos bastará con que la CPU utilice cuatro núcleos (o incluso uno o dos si son algo más antiguos y/o menos exigentes). Ten en cuenta que, si la CPU tiene mucha potencia, el procesador tendrá que estar acorde y tenerla también.
Procesador
Dependerá del presupuesto del que dispongas. Lo normal es que escojas entre AMD (gama Ryzen 3) o Intel (gama 3) si optas por un PC gaming más asequible. Si quieres uno muy potente, tendrás que decantarte por la opción de Ryzen 7 o i7 (si eliges AMD o Intel, respectivamente).
Disipador
El disipador libera el calor que puede acumular un componente de ordenador. En el caso de un pc gaming, lo ideal será escoger un disipador con un tamaño acorde al procesador para mantenerlo a una temperatura óptima. También es recomendable tener una caja diseñada para refrigerar todos los componentes de tu ordenador en conjunto.
Placa base
En ella se conectan todos los elementos y componentes internos importantes de tu PC (como el procesador, la memoria RAM y el disco duro). Por eso es tan importante, ya que es como el esqueleto de tu dispositivo.
Para adquirir la placa base, hay que elegir antes su socket (el lugar o módulo donde se instalará el procesador). Este último puede ser AMD o Intel. La recomendación general es que para un PC gaming AMD se elija un socket de AM4 y para uno de Intel, un socket 1200.
También tendrás que escoger el tamaño de tu placa base dependiendo de tus necesidades (ten en cuenta que para PCs gaming potentes lo ideal son los tamaños de ATX o EATX).
Memoria RAM
Aquí es donde se almacenan temporalmente los datos de las aplicaciones o programas que utilizas. Para tu PC de gamer nuevamente dependerá del dinero del que dispones. Puedes encontrar memorias RAM de 8GB hasta otras más potentes de 16GB. Por estas últimas, tendrás que invertir en torno a 150 euros. Cuanto mayor sea su tamaño, mejor rendimiento.
Disco duro
Es importante sobre todo para que el sistema vaya fluido y evitar retardos y detenciones de programas. Aunque esto no será tan determinante para tus juegos, sí que influirá en la instalación, carga y arranque. Para un PC gaming, lo ideal es contar con un SSD o unidad de estado sólido (esta almacena la información en microchips con memorias que están interconectadas).
5 pasos para instalar tu PC gaming
Después de haber elegido los elementos para tu PC gaming soñado, llega el momento de instalarlos. Este es el orden que tendrás que seguir:
- Instalar la placa base: debes tener cuidado para no rayarla. Deberás alinearla con el panel E/S y después poner los tornillos.
- Instalar la memoria: en la placa base, tienes que encontrar las ranuras de la memoria RAM y colocarla con cuidado ejerciendo la presión necesaria.
- Instalar el procesador: dependiendo del que hayas adquirido, tendrás que seguir unas instrucciones de montaje. Aun así, lo más normal es que tengas que quitar la barra metálica de la CPU para encontrar el soporte donde irá el procesador.
- Instalar el disipador: en este caso, también tendrás que leer las indicaciones del que hayas comprado, pero por lo general bastará con que conectes los cuatro orificios que estén cerca del módulo del procesador.
- Instalar la tarjeta gráfica: en la placa base de tu PC, tienes que localizar el espacio destinado para la tarjeta gráfica y ubicarla en ese lugar. Después tendrás que asegurarla con sus correspondientes tornillos. Posteriormente, deberás conectar el PC a la fuente de alimentación con los cables necesarios. ¡Y listo!
Como ves, el proceso no es tan complicado como parecía y ahora puedes centrarte en otros detalles que también son cruciales, como elegir el mejor monitor para tus juegos.
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