Si estás hasta el gorro de cables para cargar el móvil, te interesa la carga inalámbrica inversa o reversible. Se trata de una novedad que ya traen algunos teléfonos de alta gama de este año y es algo útil (¡y genial!).
En qué consiste la carga inalámbrica inversa o reversible
La carga inalámbrica inversa es el método por el cual un teléfono puede cargar a otro.
Así como lo oyes, si a tu móvil le queda poca batería y el de un amigo está lleno, te puede pasar la energía que tiene y cargar tu smartphone sin cable alguno, simplemente poniéndolos en contacto.
Eso sí, esta tecnología acaba de salir del horno así que aún no está muy extendida. De todos modos, promete, porque no se trata solo de poder cargar un móvil con otro. Hay más aparatos que pueden cargarse de manera inalámbrica, como algunos auriculares bluetooth. Los teléfonos con tecnología reversible actúan igual que las plataformas de carga.
¿Qué teléfonos tienen carga inalámbrica inversa?
De momento muy pocos. Esta nueva tecnología ha aparecido hace nada y, de momento, son: el Huawei Mate P20 Pro, que fue el teléfono que incluyó por primera vez esta tecnología. Por supuesto, su sucesor, el Huawei Mate P30 Pro también lo tiene. Samsung no ha querido quedarse atrás y, por eso, los tres teléfonos de su alta gama de 2019, el S10, S10+ y el S10e la llevan incorporada también.
Además, el esperado Samsung S10 5G que se prevé para mitad de año también la llevará. Es de esperar que otros móviles de alta gama de este 2019 la incluyan también.
Así que, como ves, de momento es un lujo para los teléfonos más potentes.
¿Qué tal es la carga inalámbrica reversible en cuanto a velocidad y utilidad?
No te vamos a engañar, probablemente porque esta tecnología es demasiado reciente, no es muy veloz (al menos de momento). Acostumbrados ya a las tecnologías Quickcharge de carga rápida, la inalámbrica inversa es bastante más lenta.
Para cargar una batería de unos 3.000 mAh se estima que hacen falta unos 120 minutos, más o menos.
Además, cuando el teléfono tiene un 20% de batería o menos, la capacidad de cargar inalámbricamente se desactiva. Esto es razonable, pero la realidad es que, ahora mismo, es más bien un método de emergencia para cuando hace falta ese poquito de carga hasta que llegues a un enchufe.
En el futuro es posible que eso cambie. La tecnología permite unos 20W de tope, pero la verdad es que la mayoría operan entre 5W y 10W, por eso no es una carga rápida ni potente.
Sin embargo, la tecnología avanza rápidamente y dentro de poco podremos cargar unos teléfonos con otros, Además de otros gadgets, sin necesidad de cables.
