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Términos complejos explicados de forma Simple, a lo Lowi.
¿Sabes qué es MMS? Puede que no, pero si te hablamos de SMS seguro que te suena bastante más. Esto es de esperar, ya que los MMS surgieron como una evolución del estándar SMS para ampliar sus capacidades e incluir contenido multimedia.
Entonces, ¿qué es MMS en móvil? El MMS es el estándar de mensajería que permitió a los teléfonos dar el salto del texto plano al contenido multimedia.
La utilidad principal del MMS era permitirte enviar y recibir fotos, vídeos, audios y otros contenidos enriquecidos a través de mensajes de texto.
Antes de que WhatsApp y compañía se hicieran con el mercado, si querías enviar la foto de tus vacaciones, un vídeo corto de un concierto o una grabación de voz, el MMS era tu única opción.
MMS, ¿qué significa? Las siglas MMS significan Multimedia Messaging Service en inglés, que podría traducirse como «servicio de mensajería multimedia».
Un mensaje MMS es una variante algo más compleja que el SMS. Tal como hemos explicado, se trata de un estándar que permite a los móviles enviar y recibir mensajes con contenidos multimedia, además de texto y emojis.
Ahora que sabes qué es un MMS, hablemos de cómo se diferencia del SMS. Aunque ambos servicios comparten el mismo canal (la red de tu operador móvil), las diferencias entre ambos son bastante significativas:
Una de las diferencias más notables entre el MMS tradicional y las aplicaciones de mensajería modernas es la flexibilidad. Con el MMS, solo podías enviar contenido a números que tuvieras en tu agenda o que escribieras manualmente.
WhatsApp, por su parte, ofrece más versatilidad. De hecho, puedes comunicarte con alguien sin necesidad de añadirlo permanentemente a tus contactos.
Y si te preguntas, ¿qué significa MMS en WhatsApp?, básicamente la app sustituye ese sistema tradicional por el envío de archivos multimedia a través de internet, lo que hace que compartir fotos, vídeos o notas de voz sea mucho más sencillo y económico.
Si alguna vez has querido mandar un mensaje rápido sin «ensuciar» tu agenda con contactos temporales, te vendrá bien conocer cómo enviar WhatsApp sin añadir a la agenda. Es uno de esos trucos que hace la vida más fácil.
Entendiendo entonces qué es MMS y SMS, sus puntos en común y claves que los diferencian, podemos enfocarnos en explicarte los detalles de funcionamiento de esta tecnología.
El funcionamiento del MMS es bastante más complejo que el del SMS, aunque para ti como usuario todo ocurre de forma similar.
Cuando preparas un mensaje multimedia en tu móvil y le das a enviar, tu terminal empaqueta todo el contenido (texto, imágenes, vídeos) en un formato especial llamado MIME.
Si hay varios elementos, puede usar un lenguaje llamado SMIL para sincronizar cómo se presentan (por ejemplo, para que un texto aparezca junto a una imagen concreta).
El mensaje viaja entonces al MMSC (Multimedia Message Service Center), que es el corazón del sistema. Este centro de mensajes multimedia actúa como intermediario inteligente y se encarga de varias tareas críticas:
Si el destinatario está en otra compañía, los MMSC de ambos operadores se comunican entre sí mediante el protocolo MM4 (basado en SMTP, similar al correo electrónico) para intercambiar el mensaje.
Cuando el mensaje llega al MMSC de destino, no se descarga automáticamente. En su lugar, el destinatario recibe una notificación (normalmente un SMS especial) avisándole de que tiene un MMS pendiente.
Su móvil debe entonces iniciar una conexión de datos usando el APN de MMS para conectarse al MMSC y descargar el contenido completo.
Esta complejidad explica por qué a veces los MMS fallaban: si el APN no estaba bien configurado, aunque recibieras la notificación, el contenido multimedia no se descargaba.
La principal ventaja de los MMS es la posibilidad de enviar diferentes tipos de archivos multimedia.
Son compatibles con varios formatos de archivo, como GIF y JPEG en imágenes, MP3, WAV y AMR en sonido (incluso MIDI para melodías) y vídeo MP4 o 3GP.
Donde también superan a los SMS es en su mayor capacidad de envío. Por cuestiones prácticas, la capacidad de los MMS es muy superior a la de los SMS, que tienen un límite de 160 bytes.
Además, si el destinatario no posee la tecnología necesaria para leer correctamente el mensaje MMS, recibe un enlace para poder abrirlo y reproducirlo en Internet.
Existe la posibilidad de enviar mensajes MMS a correos electrónicos e incluso blogs, aumentando las posibilidades de los teléfonos móviles sin ser imprescindible tener un ordenador a mano para publicar los contenidos.
En lo que respecta a sus desventajas, el principal inconveniente de los MMS es su mayor coste de envío.
También hay que destacar que no todos los dispositivos pueden recibir mensajes MMS y algunas personas no tienen habilitada esta mensajería en su móvil.
Y, por último, si al leer esto de repente te han entrado ganas de mandar un MMS, te enseñamos cómo configurar el servicio de MMS.
El MMS soporta una variedad amplia de formatos multimedia, aunque siempre limitados por el tamaño máximo que permita tu operador.
Lo que no funciona bien con MMS son los documentos pesados como PDFs o archivos de oficina. El sistema está diseñado para contenido multimedia ligero y presentación sincronizada, no para transferencia de archivos grandes.
Por cierto, si tienes mensajes MMS antiguos con fotos o vídeos de valor sentimental, te recomendamos que no confíes únicamente en que se mantengan en la aplicación de mensajería de tu móvil.
Con el tiempo, al cambiar de terminal o actualizar el sistema, estos archivos pueden perderse. Lo más sensato es extraer esos contenidos multimedia y guardarlos en un lugar seguro. Si no sabes muy bien cómo proteger tus archivos importantes, te interesará saber qué es una copia de seguridad y cómo configurarla en tu móvil.
Es importante aclarar una confusión común: las aplicaciones de mensajería modernas como WhatsApp, Telegram o Messenger no utilizan el estándar MMS.
Cuando envías una foto por WhatsApp, esa imagen viaja a través de internet (datos móviles o WiFi) usando los servidores de la aplicación, no mediante el sistema MMS de tu operador.
Sin embargo, la aplicación de mensajes nativa de tu móvil sí usa MMS. En Android, la aplicación de SMS/MMS te permite enviar archivos multimedia si tienes la función activada.
En iPhone, la cosa es un poco más sofisticada: la app Mensajes usa iMessage (que va por internet) cuando te comunicas con otros usuarios de Apple, pero cambia automáticamente a MMS cuando envías contenido a un Android.
El MMS está siendo gradualmente reemplazado por un nuevo estándar llamado RCS (Rich Communication Services), impulsado por la GSMA y Google. El RCS es como el heredero natural del SMS y el MMS, diseñado para competir con las apps de mensajería moderna.
También puedes gestionar MMS desde tu PC. En Windows, la aplicación Enlace Móvil (antes «Tu Teléfono») te permite sincronizar tu Android y enviar/recibir SMS y MMS directamente desde el ordenador.
En Mac, si tienes un iPhone, puedes gestionar mensajes desde la aplicación Mensajes del sistema, aunque si falla iMessage, el sistema recurre automáticamente a SMS/MMS como red de seguridad.
A pesar de que la mensajería IP ha tomado el relevo, el MMS sigue ahí como estándar de respaldo, garantizando que siempre puedas enviar contenido multimedia básico incluso cuando no tengas acceso a internet o te comuniques con dispositivos más antiguos.
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